Hace unos días vagando en la web nos encontramos con las declaraciones de Josh Sapan, Ceo de AMC, (cadena productora de la famosa serie de zombies), donde se mencionaba que los encargados de producción, estaban gestionando el universo de The Walking Dead para toda una década más. Lo cual nos dejó bastante sorprendidos pues se esperaba que anunciaran el final de la serie con su novena temporada (próxima a salir), pero al parecer, los planes de AMC son totalmente contrarios a lo que los fans piden.
Fue así como la serie de AMC fue ganando adeptos poco a poco y la serie llego a ser la más popular en su categoría. Temporada tras temporada nos mantenía al filo de nuestros asientos expectantes sobre lo que podía pasar, ya que (casi) cualquiera de nuestros personajes podía llegar a morir de un instante a otro. Además de la decisión acertada de crear una trama distinta a la que el comic seguía, esto con el fin de crear una nueva experiencia en el público que ya había leído la obra de Kirkman, logrando además que un personaje totalmente exclusivo de la serie de televisión, se convirtiera en el favorito del público.
Sin embargo, el famoso dicho “muere siendo un héroe o vive lo suficiente para convertirte en villano” se hizo presente. Pues la avaricia de los directivos de AMC dejó de preocuparse por entregarnos un producto de calidad y prefirió explotar a más no poder su gallina de los huevos de oro. Comenzaron a alargar las tramas y a meternos capítulos de relleno, los cuales al principio parecían estar justificados, pues nos mostraban un poco más de la psique de los personajes, pero a la larga comenzó a volverse aburrido y monótono.
Si bien, cada inicio o fin de temporada la serie volvía a generar hype en su público (más que nada por la popularidad de la que ya gozaban), lejos de recibir buenas críticas o un buen recibimiento, comenzaron a perder cada vez más audiencia. La serie tenía que terminar, los fans pedían un final decente, lleno de emoción con el que pudieran despedirse de una de las mejores series que han existido. Incluso el actor principal Andrew Lincoln ha dicho que abandonará el proyecto terminando la novena temporada, y estamos seguros de que no será el único. Era el momento perfecto para darle un cierre “digno” a esta producción y agradecer a los fans que los siguieron hasta el final a pesar de que la serie decaía bastante en calidad. Pero no, todo parece indicar que AMC pretende seguir con esta serie y su universo (ya tenemos una serie spin-off que si bien es algo decente, está lejos de ser tan buena como lo fue The Walking Dead).
Así que como fans de esta serie, solo nos queda agradecer por los grandes momentos que nos dio y esperar que pronto le den una muerte digna, o bien podemos hacer de cuenta que las ultimas 3 temporadas jamás existieron. Pues en este momento, la serie le hace un gran honor a su nombre, pues parece ser un zombie que no se quiere morir, al que algunos ya lo ven incluso con lástima y otros más con tristeza al darse cuenta de que ya no es esa serie llena de vida y emoción la cual esperábamos impacientemente cada 8 días. Ahora sólo es la muerta viviente de las series de televisión.
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